Diferentes ONGs están denunciando que en países como Guinea Conakry, todavía se sigue llevando a cabo la mutilación de los genitales femeninos, una práctica que sin duda es lamentable por parte de las personas que la llevan a cabo, ya que es una forma de violencia que se sigue dando en muchos países de África, todo amparado bajo una tradición sangrienta que se mantiene en nuestros días y que no tiene justificación alguna.

Lo peor de todo es que es una práctica que mutila de alguna forma a la mujer y que hace que tenga graves problemas en el futuro, además de poder padecer grandes dolores durante la mutilación, entre otras muchas consecuencias psicológica. Tanto en Egipto, Nigeria, Guinea Conakry, son países en los que se sigue con esta práctica tan sangrienta y por desgracia nadie hace para para evitar que la mujer siga siendo sometida a las tradiciones de este tipo, algo que no tiene justificación alguna.

Además de las consecuencias futuras, en el momento de hacer esta mutilación, la mujer puede morir desangrada, además de tener grandes infecciones, que es algo muy común cuando no se hacen con las medidas higiénicas básicas. Ante estas barbaridades, no se puede decir que las personas que la llevan a cabo se merezcan llamar personas, ya que son animales que no tienen todavía la capacidad de pensar que están haciendo un grave daño a las mujeres con estas mutilaciones de sus genitales y que tienen el derecho a que no se les siga practicando esta mutilación.

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