De una superficie de 245 857 km ², Guinea protege a 8 millones de habitantes entre los que aproximadamente 3 ocupan la península de Conakry, la capital.

Ofrece un patrimonio de diversidad bioecológica y un relieve únicos en África del oeste.

Constituida por cuatro regiones naturales muy distintas, Guinea marítima, la media Guinea, la alta Guinea y Guinea forestal, el patrimonio natural de Guinea ofrece un paisaje muy hecho contrastar, con una fauna rica, una flora densa y una gran diversidad cultural.

En Guinea marítima, la región de Kindia, en particular oferta de grandes posibilidades de revueltas(caminatas) en macizos que culminan a 1100 metros y un descubrimiento cultural muy rico. La región está habitada por la etnia Subcinco céntimos, mayoritaria y ganadero Peul nomadisant.

El relieve de la media Guinea está constituido por macizos y por bandejas(platos) montañosas que culminan de a 1500 metros de altitud cuyas laderas tapizadas con bosques disimulan una multitud de fuentes, torrentes y cataratas impresionantes.

El descubrimiento de la cultura y de la arquitectura del pueblo Peul en el marco de revueltas(caminatas) ambulantes o en estrellas es un triunfo considerable en los viajes propuestos.

Guinea forestal o el Bosque, como comúnmente es llamada, se sitúa en los confines del país. Muy aislada y difícil de acceso, presenta en particular un interés animalista, con los chimpancés a Bossou y los elefantes de montaña en el bosque clasificado por Ziama.

En el marco de una revuelta(caminata) más difícil, el Monte Nimbó, clasificado Patrimonio mundial de Unesco, ofrece su bosque primario, su alpages de altitud y una multitud de especies animalistas, entre las que está ciertas endémicas, como el sapo vivíparo y el hippopotame enano.

Guinea posee grandes riquezas en bauxita (2a reserva mundial), de oro y de diamante. Su agricultura está en expansión plena, aunque todavía es lejos de ser autosuficiente.